Italia es otro de los grandes protagonistas dentro del marco vinícola mundial. Si prestamos atención a su historia, podemos comprobar que el vino es una parte fundamental para comprender su cultura; incluso antes de la llegada de los romanos, la práctica de producción del vino ya había llegado a este país gracias a los etruscos y los griegos, por lo que existe una larga tradición vinícola en esta zona. Actualmente, con una quinta parte de la producción mundial y un índice de consumo por habitante de unos 38 litros al año, Italia es uno de los países vinícolas por excelencia.

wine-557896_1920

Los vinos italianos son considerados, indiscutiblemente, como unos de los mejores del mundo. Uno de los principales motivos es el amplio abanico de sabores, texturas y variedades de alta calidad que brinda cada región de este país. Aunque total podríamos sumar alrededor de 500 Denominazione di Origine (405 vinos DOP,73 de las cuales son DOCG), a continuación te ofrecemos una visión general de las denominaciones más importantes procedentes de esta bella región.

Piamonte. Se trata de una de las regiones más importantes. Sus viñedos ocupan la sexta parte de la superficie total de viñedos del país, y sus vinos son únicos y muy personales. La uva principal es la Nebbiolo, protagonista de los famosos vinos Barolo DOCG y Barbaresco DOCG. Si nos vamos al sureste, encontraremos otras variedades de vino tinto como la Barbera. En cuanto a blancos, destaca el vino Asti Spumante elaborado con la uva Moscato Bianco.

Veneto. Situada en el noreste, esta zona es la más variada en cuanto a producción y posee tres denominaciones de gran relevancia: Valpolicella DOC (vino ligero, sabroso, de color rubí), el Bardolino DOC (más ligero y con aroma a cereza) y el Soave DOC (seco, sabroso, de aromas afrutados con un suave toque de almendra tostada). Dentro de esta región se elabora también el mundialmente conocido Prosecco, el vino espumoso más consumido en Italia.

Toscana. Esta es una zona de larga tradición vinícola que fue notablemente impulsada en los años 80, produciendo un efecto inspirador en las demás regiones italianas. Sus vinos más conocidos son los de Chianti. La denominación Chianti DOCG, que engloba un total de cinco provincias, da nombre un vino tinto en el que la cepa Sangiovese, mezclada con Canaiolo y variedades blancas como Trebbiano y Malvasía, es la protagonista. Otras denominaciones notables son: Brunello di Montalcino DOCG (vinos de cuerpo y sabor intenso), Vino Nobile di Montepulciano DOCG, Carmignano DOCG, y Pomino DOCG.

Sicilia. Dentro de la producción vinícola de esta isla destaca el Marsala, uno de los vinos encabezados más importantes a nivel internacional. Se produce en los alrededores de la ciudad de Marsala a raíz de vinos blancos de las cepas Catarratto, Grillo Damaschino e Inzolia. Por ley, debe encabezarse con aguardiente de vino, y puede llegar a reposa hasta diez años en barrica de roble. Otros vinos destacados son Alcamo DOC (blanco seco) y Cerasuolo di Vittoria DOC (tinto).

Emilia-Romagna. El vino más famoso de esta región es el Lambrusco (frizzante), de aguja y dulce. Aunque generalmente es tinto, igualmente puede ser blanco o rosado. En esta zona destacan: Lambrusco di Sorbara DOC, Lambrusco Salamino di Santa Croce DOC, Lambrusco Grasparossa di Castelvetro DOC y Lambrusco Reggiano DOC, este último de mayor producción.

Trentino/ Alto Adige. Esta región se ha convertido hoy en día en la más importante de Italia en cuanto a la producción de vinos blancos aromáticos, elaborados con las variedades Pinot Blanco, Riesling, Chardonnay y Gewürztraminer. También está reconocida como una de las mejores regiones productoras de vinos espumosos del mundo, empleando el método clásico para su elaboración.

Otras zonas importantes dentro del país italiano son: Lombardía, Valle de Aosta, Liguria, Friul-Venecia Julia, la isla de Cerdeña y Apulia, la región que recoge una mayor producción.