Si eres un amante del vino y del enoturismo, seguramente estés familiarizado con una de sus actividades estrella: las catas de vino. Prácticamente todas las bodegas incluyen catas dentro de sus programas de actividades, ya sea para personas iniciadas en el mundo del vino tanto como para auténticos expertos catadores. Debemos dejar atrás la idea anticuada de que este tipo de actividades están hechas para profesionales o personas con altos conocimientos del vino. El vino está ahí para ser disfrutado por todos.
¿Qué tipo de catas existen?
No existe solo un tipo de catas, y no todas tienen el mismo ceremonial ni modos de proceder. Podemos diferenciar tres modalidades:
- Cata vertical. Aquella en la que se prueba el vino de la bodega pero de diferentes cosechas.
- Cata horizontal. Aquella en la que se ofrecen vinos diferentes pero pertenecientes a la misma cosecha y denominación de origen
- Cata ciega. Aquella en la que se prueban distintos vinos de los cuales no se tiene ningún tipo de información previa.
¿Cómo se cata un vino?
El objetivo fundamental de una cata de vinos es analizar sensorialmente el vino para explorar sus características y propiedades en cualquiera de sus tres niveles: visual, olfativo, y gustativo. En otras palabras, aprender las diferentes cualidades del vino al mismo tiempo que disfrutamos de él.
Con el fin de que no influyan elementos externos que distorsionen las apreciaciones del catador, la cata debe realizarse en un lugar en el que se disponga de una buena iluminación y carente de olores, con buena ventilación y con una temperatura media. Igualmente, es importante utilizar copas transparentes e incoloras que no confundan al catador a la hora de apreciar el color y brillo del vino.
Fase visual
Tras descorchar el vino, se procede a oler el corcho. Esto nos puede dar muchas pistas acerca del estado del vino que vamos a probar. Se coge la copa, siempre por el tallo o la base, y se inclina la copa unos 45º sobre un fondo blanco, el propio mantel o una servilleta por ejemplo, para observar el color, el brillo y la limpieza del vino. Si podemos ver a través del vino podremos decir que es de capa baja. Si, en cambio, es complicado ver lo que hay detrás de la copa, diremos que es de capa alta. Por otro lado, el color del vino nos dará una idea de la edad del vino; si es brillante y color cereza, será joven; si es granate seguramente esté más envejecido con crianza.
Fase olfativa
En esta fase, se procede a oler el vino acercando la copa a la nariz para apreciar los olores primarios, propios de la variedad de uva. Después, se mueve la copa y se huele nuevamente para inhalar los secundarios, los que resultan tras la fermentación.
Por último, se procede a una tercera agitación para poder distinguir los aromas terciarios, los bouquet, aquellos que se desarrollan durante la crianza del vino.
Fase gustativa.
Finalmente, probamos el vino con un pequeño sorbo. El ataque es esta primera impresión que recibimos al degustar el vino, el cual debemos pasar de un lado a otro de la lengua si queremos apreciar los cuatro sabores básicos. Si un vino consigue un perfecto equilibrio entre los cuatro, podemos decir que es un vino redondo.
Tras este paso, se procede a determinar la textura (suavidad, untuosidad, astringencia, rugosidad…), así como la vía retronasal, que hace referencia a la sensación que nos deja el vino pasados unos minutos en la nariz.
Es importante saber que el vino no debe tragarse, de modo que el alcohol no pase a la sangre y así evitar que el catador se embriague.
Por último se indicará qué final ha dejado el vino, tanto a nivel sensorial (final agradable, ácido…) como haciendo referencia a la duración (largo si dura entre nueve y doce segundos, corto si dura menos de dos segundos).
Aunque aquí encuentres, a grandes rasgos, los diferentes pasos de los que consiste una cata, desde Comenge te recomendamos que te animes a venir y realizar una cata de mano de nuestros expertos, dentro de nuestra amplia oferta de enoturismo. Una manera divertida, diferente y única de aprender y disfrutar del mejor vino de Ribera de Duero.
Como decís, este artículo trata a gandes rasgos los pasos de una cata, pero lo hableis explicado genial. Lo primordial es disfrutar cada una de las tres fases que destacáis y marcharse con muy buen sabor de boca. Un abrazo!
Por supuesto, sin duda lo mas importante es disfrutar. Un abrazo