La uva es nuestra materia prima, lo más importante de nuestro proceso de producción. Necesitamos uvas de calidad, con unos parámetros de acidez, azúcar y maduración del hollejo y las pepitas muy concretos para conseguir el vino que deseamos. Pero, ¿cómo se cultiva la vid?, ¿cómo se obtienen las cepas?
Las técnicas de multiplicación de las cepas pueden ser por vía sexual (semillas) o por vía asexual (estacas, acodos e injertos). La primera técnica apenas es utilizada por los viticultores, ya que se trata de un procedimiento muy lento que además no permite más que conservar los caracteres de la planta que ha producido las pepitas.
Las técnicas de propagación vegetativa aparecieron muy pronto durante la revolución agrícola del Neolítico. Se dieron cuenta de que los sarmientos pueden cortarse y replantarse directamente en la tierra, donde echará raíces y se convertirá en un nuevo ejemplar, perpetuando las características de la variedad.
Vías de propagación vegetativa
Las formas “no sexuales” de reproducción de las cepas son realizadas por el hombre, no ocurrirían de forma natural en el viñedo. Algunas de las más habituales son las siguientes:
Estacas
Consiste en plantar un fragmento de sarmiento en un medio favorable separado de la cepa, para que se desarrollen raíces y un sistema aéreo idéntico a la planta madre. Normalmente este proceso se realiza en viveros en los que los viticultores pueden comprar las variedades que prefieran, un clon concreto e incluso el que mejor se adapte a un tipo de suelo en particular. Una vez comprado, se trasplanta al viñedo.
Acodo
A diferencia de las estacas, este proceso consiste en doblar los sarmientos y enterrarlos dejando sobresalir el extremo superior. La zona en contacto con la tierra echará raíces y en ese momento podrá cortarse de la planta original, obteniendo una nueva planta.
La ventaja del acodo es que el sarmiento continúa alimentándose de la savia hasta que ha enraizado. El inconveniente de este proceso no es fácil distribuir el viñedo de una manera ordenada. Solo los permite la propagación vegetativa en las zonas más cercanas de la planta madre. No obstante, es muy práctico para reemplazar cepas en una viña que nos faltan algunas plantas.
Injerto
Un método de propagación vegetativa de las plantas en el que una porción de tejido de una planta se une con otra ya asentada, de tal manera que el conjunto crece como un solo organismo.
En otras palabras, se basa en unir un trozo de sarmiento de una planta a otra vitis (habitualmente americana) para que crezcan como una única cepa. Se fija una porción del sarmiento en otra fracción de vegetal denominada portainjerto, que se encargará del sistema radicular y servirá de soporte.
La razón por la que se hace con vitis americana es porque es resistente a la filoxera, enfermedad que arrasó con prácticamente todo el viñedo en Europa en el S.XIX. De esta forma obtendremos las raíces de la vitis americana y la parte aérea de la vitis vinífera.
El injertado suele ser un trabajo extremadamente manual y artesanal que requiere de gran conocimiento y técnica. Estas técnicas de propagación se aprovechan de que, durante el crecimiento, las células de la planta se dividen sin modificar su ADN, de modo que los nuevos ejemplares propagados tienen el mismo contenido genético que la planta original.
Evidentemente, al realizar una nueva plantación debemos tener claro la variedad que queremos plantar, pero tendremos que tener en consideración otros parámetros como el suelo en el que vamos a realizar la plantación, la orientación de la parcela, el clima de la zona. En este post os damos algunos consejos a valorar si queréis plantar un nuevo viñedo.
Soy Elío Fernández y tengo 79 años, vivo en una zona de Galicia de la D.O.Valdeotrras, tengo algunas viñas y tengo una pequeña producción de uvas qué vendo a una cooperativa, también hago algo de vino para consumo propio.En lo referente a la reproducción del viñedo tengo hecho bastantes injertas por el método de puga y también por el método de yema.
Muchas gracias Elio por su contribución, nos alegra saber que domina el arte de multiplicación de la vid.